El principal funcionario de derechos humanos de las Naciones Unidas ha expresado una preocupación significativa sobre la situación en Venezuela, destacando las detenciones arbitrarias y el uso de fuerza excesiva por parte de las fuerzas de seguridad tras la controvertida elección presidencial en el país. La represión ha estado marcada por un perturbador patrón de abusos de derechos humanos, incluyendo acciones desproporcionadas contra civiles. Esta condena de la ONU subraya la creciente inquietud de la comunidad internacional ante el enfoque del gobierno venezolano hacia la disidencia y la oposición política en medio de disputas electorales. La situación ha atraído la atención global, exigiendo una acción inmediata para abordar estas violaciones de derechos humanos.
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